sábado, 25 de julio de 2009

como Azul y café

Azul y café, Azul y café,
como bombos que dicen
que vino y se fue,
así nada mas,
como su último golpe
que se desase sin invitarnos a algo jamás…

Pero es tan fácil dejar mirar
cuando de eso indeseable no sabes nada mas,
pues tampoco esperas nada mas,
y otro golpe al bombo ni siquiera hace dudar,
ni tampoco deja con ganas de más;
menos se perdió en la guerra, ¿qué más se perdió por jugar?
De espalda a la conmoción, ¿sus ruidos de verdad
no dan curiosidad?,
sí, la humanidad perdió el modo divertido
de olvidar y renovar, todo lo hicieron tortuoso,
como la estridencia de un bombo, que no importa si
golpea lento o rápido, pues igual parece estridente
¿tanto molesta molestar?,
como si fueran una cuerda que todo el día se hace vibrar…
¿qué más da que simplemente quererse voltear, verdad?
Ni una mirada de perfecta ironía seria tan irónica como
necesito que sea, por ese gustillo
de intentar provocar, nada más…

Azul y café, Azul y café,
como lo estable que por quedarse se fue…

¿Puede funcionar un juego sin reglas?
¿Puede tentar una presencia ajena?
¿Puede invitar a algo una molestia?
Sí, si no juegan, si no tientas, si no invitas…
No, si juegas, si tientas, si invitas…
Que fome es si lo haces para perder…
Sólo perder la posibilidad de ganar,
¿Qué auto-engaño, verdad?

Azul y café, como lo que vino y se fue,
pensando que no te quedaras donde estas
como la inestabilidad que por irse se quedó…
la ilusión de ordenar la habitación
solo da espacio para que el desorden haga en paz su labor,
¿qué irónico verdad?…

no me canso de molestar si es que esto hace bien su labor
¿o no, Azul y café?

1 comentario:

Cinica dijo...

Me duele mucho el estomago...

es confuso, pero tiene algo atras que segro justifica todo...